CONFESSIONS

Kokuhaku (Confessions)
AÑO	2010
DURACIÓN	106 min.
PAÍS
DIRECTOR	Tetsuya Nakashima
GUIÓN	Tetsuya Nakashima (Novela: Kanae Minato)
MÚSICA	Toyohiko Kanebashi, Boris, Radiohead
FOTOGRAFÍA	Shoichi Ato, Atsushi Ozawa
REPARTO	Takako Matsu, Masaki Okada, Yoshino Kimura, Yukito Nishii, Kaoru Fujiwara
PRODUCTORA	Toho Company
GÉNERO	Thriller. Drama. Intriga | Thriller psicológico. Drama psicológico. Colegios & Universidad
SINOPSIS	En un instituto, el último dia de clase, una profesora se despide de sus alumnos y, además de anunciarles que deja la escuela, les confiesa que su hija de cuatro años que, aparentemente, murió ahogada en la piscina de la escuela, fue en realidad asesinada por dos estudiantes de esa misma clase. También les hace saber que ya ha puesto en marcha su venganza contra ellos. (FILMAFFINITY)

Desconcertante, maravilloso ejercicio de narración, gran guión, complejidad estructural, mezcla constante de recursos narrativos sin complejos, interpretaciones perfectas, es un fantástico y extrañamente largo video-clip con una atmósfera hipnótica impropia del cine actual, que sin embargo atrapa.

Se asiste desconcertado ante la puesta en escena de los primeros 30 minutos en esa clase, en una exposición de los hechos inverosímil, que va cobrando sentido con el desarrollo de las historias personales de los chicos y las madres. Fantásticos personajes, los huecos se pasan por alto, lo difícil de asimilar se perdona porque está narrado todo con tan gran agilidad y personalidad que no se le puede reprochar nada. Te deja estupefacto.

Nunca pensé que la cámara lenta y el continuo flashback pudieran resultar en una narración cinematográfica que cuenta una historia como ésta. Qué difícil. Qué decir del hecho de cambiar todo con un final cuya frase tiene 3 palabras (se es libre de interpretar que se cambia o no, otra ventaja), qué espectáculo visual, qué giros, qué música, funcionando a la perfección con el clima hipnótico de las imágenes.

Violencia poética, poesía violenta. Complejidad, simplicidad. Increíbles esas madres, tremendo Nao, fantásticoShuya (imposible no recordar Death Note viendo esta película y sobre todo ese personaje, sentado exactamente en el mismo sitio en la clase que Yagami Light).

Tremenda. Se me ocurre definirla con el término: PULCRITUD. Aunque no sería descabellado decir de ella que es una obra de arte.

Para quienes no tengan todavía datos suficientes para confiar en esta película, sólo indicar que merece la pena por lo diferente que resulta el tratamiento dado a un tema tan complejo y difícil de abordar como la venganza. Si en el cine asiático es un tema recurrente, resulta especialmente repetitivo en el koreano, y sin embargo no nos cansaremos lo suficiente de recomendar películas como Old Boy, y las dos Simphaty's  que forman la trilogía de la venganza de Park Chan Wok (Symphaty for Lady Vengeance y Sympathy For Mr. Vengeance), así como la reciente I saw the devil, o la interesante Bedevilled, sin olvidarnos de la fantástica A bittersweet life.

Nos encontramos en Confessions un tratamiento si cabe más poético de la venganza, en el que confluyen otros temas de especial interés como la educación, el fracaso del sistema educativo, la permisividad, el acceso a la información de los jóvenes, el nihilismo imperante en la juventud,  inagotables en cuanto al debate se refiere y que dotan de una profundidad espectacular a la película.

Cabe destacar las inmejorables interpretaciones de los jóvenes actores, inmensos, y la estructura de la narración, en la que se pasa de una confesión en primera persona del personaje principal, la profesora, al testimonio de todos los personajes (los chicos implicados) en primera persona también, fluyendo el texto entre las visiones personales de los implicados en el acontecimiento que hace de eje en la historia, para retornar al testimonio de la principal artífice de la venganza, en un final preciosista en la forma y el contenido, que podemos calificar, sin temor a equivocarnos, de apoteósico. Os dejo el trailer y os invito a disfrutarla tanto como lo hice yo. Es una pena que la sensibilidad del cine asiático nos resulte un tanto diferente, extrema en ocasiones, difícil de asimilar, es una lástima que esa distancia emocional pueda hacer que mucha gente no contemple esta grandiosa película.