jueves, 29 de mayo de 2008

Comienzos sin bordes

Esta noche debió de ser la de ayer...en que te pensé para poder reflejarte en estas líneas ansiosas de dejar de ser vacío, una nada en un espacio intersideral. Pero me ocurre cuando trato de escribir que el pensamiento se metarmofosea en una pulga danzarina que vibra en una porción de espacio, y cuando pulso la tecla, la palabra que quería apresar la emoción, el color, el aroma, el pensamiento o la idea, se transforma en otra cosa diferente de lo que fue originariamente. Como el boligrafo que asusta al papel y que no puede capturar a la pulga saltarina que es el pensamiento. Aplastar con la punta del boligrafo en la libreta un pensamiento, que salta a otra zona del papel para no dejarse retratar en tinta, una tarea de un corredor de fondo que impotente lucha contra la distancia, el lenguaje que no deja expresar las convulsiones de tus pasiones incontrolables, como el corredor no puede con tantos kilómetros porque las piernas no responden, de la misma manera lo símbolos no sostienen las millas de distancia que separan los signos de la comprensión.

Y es que una vez más te pensé, y me pregunté si he dejado de amar, pero no sabía como expresarlo....

1 comentario:

La guapa dijo...

Así es la tristeza, "es" más nunca se sabe como describirla.

Un abrazo, de hecho a mí tambien se me cuatrapean las letras.Besos